“Tengo esta extraña noción, somos una democracia ... si no puedes conseguir los votos ... no puedes [legislar] por orden ejecutiva a menos que seas un dictador. Somos una democracia. Necesitamos consenso ".
Esas son las palabras de Joe Biden. Y no, esto no es una cuestión de desenterrar un clip de los años 80 o 90 en un intento de jugar un juego de gotcha en un flip-flop anticuado. Ese es el candidato demócrata Biden, menos de tres semanas antes de las elecciones presidenciales de 2020, hablando con ABC News 'George Stephanopoulos sobre los peligros de gobernar como un dictador.
Solo en la primera semana del presidente Biden, ha firmado 37 órdenes ejecutivas y acciones hasta el jueves. Eso es 33 más que el tipo al que indirectamente se refirió como dictador, en forma de predecesor.Donald Trump. Son 32 más que su antiguo jefe,Barack Obamay 37 más que George W. Bush, que firmó cero en su primera semana como presidente.
"Con unidad podemos ir a hacer grandes cosas, cosas importantes", dijo Biden durante su discurso inaugural. “La unidad es el camino a seguir. Debemos afrontar este momento como Estados Unidos de América. Nunca hemos fallado en Estados Unidos cuando hemos actuado juntos ".
"Sin unidad, no hay paz, sólo amargura y furia. No hay progreso, sólo indignación extenuante. No hay nación, sólo un estado de caos. Este es nuestro momento histórico de crisis y desafío, y la unidad es el camino a seguir", también dijo, en un discurso elogiado por los de ambos lados del pasillo político.
Incluso la junta editorial del New York Times está pidiendo al presidente que pise los frenos para gobernar exclusivamente por mandato ejecutivo
"Aléjese con las acciones ejecutivas, Joe", dice el titular del jueves . "El presidente Biden tiene razón al no permitir que su agenda sea rehén, pero legislar a través del Congreso es un mejor camino".
Pero los hechos de Biden, con más de tres docenas de órdenes y acciones ejecutivas, simplemente han contrastado directamente con sus palabras de unidad y compromiso. Esa es una buena manera de decir que, al menos hasta ahora, todo lo que el presidente prometió con respecto a trabajar con la otra parte ha sido una absoluta tontería, especialmente si se considera que su partido controla la Cámara de Representantes y el Senado.
Si la historia es una indicación, la mayoría de las órdenes ejecutivas se derivan de la sed de un presidente de eludir al Congreso. Y en el Día 1 de la nueva administración, como un microcosmos específico que subraya mejor este punto, el equipo de Biden, en un apuro por satisfacer la sed del flanco izquierdo del partido, decidió cerrar la expansión del oleoducto XL Keystone. y los 11.000 trabajos temporales y de tiempo completo que lo acompañaron.
Hizo esto durante una pandemia. Con trabajos que ya son un bien escaso.
Múltiples sindicatos que respaldaron a Biden, incluidos los Teamsters, expresaron su consternación por la decisión unilateral del presidente.
"Los Teamsters se oponen firmemente a la decisión de ayer, e instamos a la administración a reconsiderarla", dijo el director de Teamsters, Jim Hoffa, al escuchar la noticia.
En una historia relacionada, Rusia y Venezuela se beneficiarán muy bien de un Estados Unidos sin Keystone para llenar el vacío energético, mientras que China estará bastante complacida de que Estados Unidos se haya reincorporado al acuerdo climático de París, favorable a Beijing , que estaba entre las 37 órdenes ejecutivas y acciones. firmado.
La prensa no le ha hecho ninguna pregunta directa a Biden sobre la orden de Keystone que acaba con el trabajo, por supuesto. Eso es lo que sucede cuando el líder del mundo libre requiere que un miembro del personal llame a una lista predeterminada de reporteros invariablemente amigables, compilada por su equipo, en lugar de llamar a los reporteros él mismo.
¿Qué tan amigable? Aquí hay una "pregunta" sobre el tema de la unidad que se le planteó el martes. "Dado que la unidad es una parte clave de su mensaje y su promesa, ¿puede hablar y reflexionar un poco más sobre lo que es la unidad cuando la ve y como la define?" preguntó la corresponsal del Washington Post en la Casa Blanca, Annie Linskey, una de las seis periodistas autorizadas a interrogar al nuevo presidente en su primera conferencia de prensa.
Nota: Siempre que se le pide a alguien en el poder que refleje o defina algo, es un ejercicio de ofrecer no solo una pelota de béisbol, sino una pelota de playa a la persona en el extremo receptor para sacarlo del parque.
"Unity también está tratando de reflejar lo que la mayoría del pueblo estadounidense - demócrata, republicano, independiente - piensa que está dentro del punto de apoyo de lo que se necesita hacer para mejorar sus vidas y las vidas de los estadounidenses", respondió Biden.
En última instancia, la mayoría de las órdenes ejecutivas provienen del deseo de un presidente de eludir al Congreso. Las acciones de Biden son lo opuesto a alguien que predica el compromiso, algo que la mayoría de los demócratas, republicanos e independientes quieren en última instancia, pero que probablemente no conseguirán con esta administración.
En una encuesta de Harvard CAPS / Harris realizada después de que Trump asumió el cargo en 2017, "el 91 por ciento de los estadounidenses dijeron que quieren que las dos partes se comprometan con sus principios para hacer las cosas", segúnMark Penn, ex estratega senior del presidente Clinton y más tarde de Hillary Clinton. Penn ayudó a diseñar la encuesta.
Esas son las palabras de Joe Biden. Y no, esto no es una cuestión de desenterrar un clip de los años 80 o 90 en un intento de jugar un juego de gotcha en un flip-flop anticuado. Ese es el candidato demócrata Biden, menos de tres semanas antes de las elecciones presidenciales de 2020, hablando con ABC News 'George Stephanopoulos sobre los peligros de gobernar como un dictador.
.@JoeBiden in October: “I have this strange notion, we are a democracy … if you can’t get the votes … you can’t [legislate] by executive order unless you’re a dictator. We’re a democracy. We need consensus." pic.twitter.com/7UotJCXSm3
— Tom Elliott (@tomselliott) January 26, 2021
Solo en la primera semana del presidente Biden, ha firmado 37 órdenes ejecutivas y acciones hasta el jueves. Eso es 33 más que el tipo al que indirectamente se refirió como dictador, en forma de predecesor.Donald Trump. Son 32 más que su antiguo jefe,Barack Obamay 37 más que George W. Bush, que firmó cero en su primera semana como presidente.
"Con unidad podemos ir a hacer grandes cosas, cosas importantes", dijo Biden durante su discurso inaugural. “La unidad es el camino a seguir. Debemos afrontar este momento como Estados Unidos de América. Nunca hemos fallado en Estados Unidos cuando hemos actuado juntos ".
"Sin unidad, no hay paz, sólo amargura y furia. No hay progreso, sólo indignación extenuante. No hay nación, sólo un estado de caos. Este es nuestro momento histórico de crisis y desafío, y la unidad es el camino a seguir", también dijo, en un discurso elogiado por los de ambos lados del pasillo político.
Incluso la junta editorial del New York Times está pidiendo al presidente que pise los frenos para gobernar exclusivamente por mandato ejecutivo
"Aléjese con las acciones ejecutivas, Joe", dice el titular del jueves . "El presidente Biden tiene razón al no permitir que su agenda sea rehén, pero legislar a través del Congreso es un mejor camino".
Pero los hechos de Biden, con más de tres docenas de órdenes y acciones ejecutivas, simplemente han contrastado directamente con sus palabras de unidad y compromiso. Esa es una buena manera de decir que, al menos hasta ahora, todo lo que el presidente prometió con respecto a trabajar con la otra parte ha sido una absoluta tontería, especialmente si se considera que su partido controla la Cámara de Representantes y el Senado.
Si la historia es una indicación, la mayoría de las órdenes ejecutivas se derivan de la sed de un presidente de eludir al Congreso. Y en el Día 1 de la nueva administración, como un microcosmos específico que subraya mejor este punto, el equipo de Biden, en un apuro por satisfacer la sed del flanco izquierdo del partido, decidió cerrar la expansión del oleoducto XL Keystone. y los 11.000 trabajos temporales y de tiempo completo que lo acompañaron.
Hizo esto durante una pandemia. Con trabajos que ya son un bien escaso.
Múltiples sindicatos que respaldaron a Biden, incluidos los Teamsters, expresaron su consternación por la decisión unilateral del presidente.
"Los Teamsters se oponen firmemente a la decisión de ayer, e instamos a la administración a reconsiderarla", dijo el director de Teamsters, Jim Hoffa, al escuchar la noticia.
En una historia relacionada, Rusia y Venezuela se beneficiarán muy bien de un Estados Unidos sin Keystone para llenar el vacío energético, mientras que China estará bastante complacida de que Estados Unidos se haya reincorporado al acuerdo climático de París, favorable a Beijing , que estaba entre las 37 órdenes ejecutivas y acciones. firmado.
La prensa no le ha hecho ninguna pregunta directa a Biden sobre la orden de Keystone que acaba con el trabajo, por supuesto. Eso es lo que sucede cuando el líder del mundo libre requiere que un miembro del personal llame a una lista predeterminada de reporteros invariablemente amigables, compilada por su equipo, en lugar de llamar a los reporteros él mismo.
¿Qué tan amigable? Aquí hay una "pregunta" sobre el tema de la unidad que se le planteó el martes. "Dado que la unidad es una parte clave de su mensaje y su promesa, ¿puede hablar y reflexionar un poco más sobre lo que es la unidad cuando la ve y como la define?" preguntó la corresponsal del Washington Post en la Casa Blanca, Annie Linskey, una de las seis periodistas autorizadas a interrogar al nuevo presidente en su primera conferencia de prensa.
Nota: Siempre que se le pide a alguien en el poder que refleje o defina algo, es un ejercicio de ofrecer no solo una pelota de béisbol, sino una pelota de playa a la persona en el extremo receptor para sacarlo del parque.
"Unity también está tratando de reflejar lo que la mayoría del pueblo estadounidense - demócrata, republicano, independiente - piensa que está dentro del punto de apoyo de lo que se necesita hacer para mejorar sus vidas y las vidas de los estadounidenses", respondió Biden.
En última instancia, la mayoría de las órdenes ejecutivas provienen del deseo de un presidente de eludir al Congreso. Las acciones de Biden son lo opuesto a alguien que predica el compromiso, algo que la mayoría de los demócratas, republicanos e independientes quieren en última instancia, pero que probablemente no conseguirán con esta administración.
En una encuesta de Harvard CAPS / Harris realizada después de que Trump asumió el cargo en 2017, "el 91 por ciento de los estadounidenses dijeron que quieren que las dos partes se comprometan con sus principios para hacer las cosas", segúnMark Penn, ex estratega senior del presidente Clinton y más tarde de Hillary Clinton. Penn ayudó a diseñar la encuesta.
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Las acciones del presidente Biden muestran que no está muy interesado en lo que indudablemente quieren más de 9 de cada 10 estadounidenses.
"No se puede [legislar] por orden ejecutiva a menos que sea un dictador", dijo la versión 2020 de Joe Biden hace tres meses. Ese tipo debería saludar a 2021 Biden en algún momento y preguntar qué ha cambiado exactamente desde sus comentarios preelectorales.
Las acciones del presidente Biden muestran que no está muy interesado en lo que indudablemente quieren más de 9 de cada 10 estadounidenses.
"No se puede [legislar] por orden ejecutiva a menos que sea un dictador", dijo la versión 2020 de Joe Biden hace tres meses. Ese tipo debería saludar a 2021 Biden en algún momento y preguntar qué ha cambiado exactamente desde sus comentarios preelectorales.
Fuente: The Hill
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